5 de julio de 2012

Nota audiencia causa Gallo/Madariaga


Los cortes de luz traen recuerdos de los ’80, época en la que la empresa que suministraba el servicio era nacional
Mientras Francisco daba su testimonio sobre un confuso hecho que involucraba a la empresa de seguridad de su apropiador, el edificio de Comodoro Py quedó a oscuras debido a un corte de luz.
A oscuras: parecía una metáfora de lo que se venía escuchando en la sala: Abel Madariaga contaba al tribunal las noticias que le habían llegado de Silvia mientras estaba en cautiverio y cómo fue la búsqueda de su hijo. Sus palabras mostraban la oscuridad que vivió en su país, en el exilio y en el regreso.
Concluido eso, salió a mezclarse con los espectadores y la penumbra del relato se disipó en un aplauso, abrazos y lágrimas de emoción.
Cuando le llegó el turno, Francisco respondió a las preguntas que le hicieron sobre su relación con el apropiador con más palabras que daban un dejo de tristeza. Malos tratos, hostigamiento, situaciones poco claras. Oscuro… Acto seguido, corte de luz.
La sala quedó en silencio, luego las preguntas y la resolución de vaciarla hasta que volviera el suministro.
Pasaron los minutos y la gente que salía por un café y volvía; otros, cigarrillo en mano, iban a averiguar cuánto tardaría el apagón. No había respuesta aún.
Pero a pesar de la falta de energía eléctrica, habían empezado a verse las caras luminosas de un padre y un hijo que estaban acompañados de muchos seres queridos en búsqueda de la justicia.


NdR: Aclaro en el título del post que es una nota, porque es un TP para la facultad que hice el año pasado. Iba a ser publicado, pero nunca llegó, por eso no hay título tampoco.

No hay comentarios.: